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¿Qué se puede hacer con la gente que fuma en espacios cerrados?

(cc) Wlodi

Está bien. Es parte del juego. Nadie obliga a nadie a ir a meterse a lugares donde uno sabe que van a estar fumando. Pero la Ley del Tabaco fue promulgada para algo, no para que algunos locales la tomaran en cuenta y otros no. Por algo también se hizo la campaña en las cajetillas de cigarro: para hacer entender de una manera gráfica que el cigarro NO HACE BIEN. Puede ser rico y todo, pero bien, NO HACE. Si pese a eso uno quiere fumar, todo bien, no tengo ningún problema con la gente que fuma, pero sí tengo problemas con la gente que fuma delante de otra que no y que puede molestarle. ¿Hay algo que se pueda hacer al respecto? Parece que no.

Además de ser periodista, también pongo música en distintos lugares, por lo que estoy expuesto a GRANDES cantidades de humo cada noche en que salgo a trabajar. Para peor, estoy resfriado, por lo que el humo me hace aún peor. Algunos podrían decir “para qué sales, quédate en tu casa”. Sí, ok, tienen razón, pero al final es un trabajo como cualquier otro y la mayoría de las veces uno debe ir a trabajar aunque no se sienta bien. La cosa es que ayer me tocó no más, y obviamente era un lugar cerrado. Y más encima, tuve la mala suerte que ayer al lado mío habían 4 ó 5 personas que estaban fumando al mismo tiempo y en un minuto el ambiente se empezó a poner realmente irrespirable. Yo no sabía muy bien qué hacer. Por un lado quería decirles que por favor apagaran sus cigarros, pero no tenían por qué hacerlo y podría haberme expuesto a un categórico “NO”, ya que TODOS estaban fumando. Finalmente, luego de que todos terminaran sus respectivos cigarros, seguí poniendo música un poco más tranquilo, pero cuando me di cuenta que no habían pasado ni cinco minutos y ya estaban fumando de nuevo me dieron ganas de gritarles “NO SÓLO SE ESTÁN MATANDO USTEDES. ME ESTÁN MATANDO A MÍ TAMBIÉN”. Pero no lo hice. Pero ya cuando otros dos -de los mismos 4 ó 5 que estaban fumando hace 5 minutos- volvieron a prender un cigarro, no aguanté más y le dije al que estaba más cerca mío “compadre, muy en buena, puedes tirar el humo para el otro lado, que estoy medio enfermo y me llega todo”. El tipo quedó sorprendido y medio-en-buena-medio-en-mala me miró y me dijo: “Bueno”. Y se dio vuelta.

Entonces a lo que apunta esta columna si bien se creo una Ley del Tabaco para algo, no pretendo yo andar haciendo una fiscalización y a los lugares a los que vaya andar diciendo “oye, aquí no se está cumpliendo la ley”, NO. Si bien hay lugares que de frentón dijeron: No se puede fumar. Hay otros que simplemente miran para el lado y no acatan ninguna de las reglas que establece el mandato. Dejando el tecnicismo de lado de “qué se puede hacer y qué no”, y a lo que apunta finalmente este texto es, ¿no debería la gente fumadora pensar un poco más en los que no fuman y si van a fumar de todas formas, irse a un espacio abierto donde no “obliguen” a los no-fumadores a respirar su humo?, ¿qué se puede hacer con la gente que fuma en espacios cerrados, sobre todo cuando la ley está del lado de los no-fumadores?